La Penitenciaría Estatal de Wyoming, situada en Rawlins, Condado de Carbon, Wyoming, es una prisión histórica que lleva en funcionamiento desde 1901. Es una parte importante de la historia del estado y ofrece una visión única de la evolución del sistema penal en Wyoming.
La Penitenciaría Estatal de Wyoming, que abrió sus puertas en Rawlins en 1901, está situada en un distrito histórico en las calles 6 y Walnut. Este distrito fue incluido en el Registro Nacional de Lugares Históricos en 1983, lo que subraya aún más la importancia histórica de la penitenciaría.
El edificio original de 1901 de la Penitenciaría Estatal de Wyoming es ahora un museo conocido como Wyoming Frontier Prison. Los visitantes tienen la oportunidad de realizar visitas guiadas por la antigua prisión y ver exposiciones sobre las prisiones antiguas y actuales, así como el Museo de Oficiales de Paz de Wyoming.
Historia & Antropología Casa histórica
500 W. Walnut, Rawlins
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El Museo de la Prisión Fronteriza de Wyoming en Rawlins ofrece a los visitantes una mirada auténtica a la historia penal del estado. Ubicado en una antigua prisión, el museo brinda una experiencia austera y aleccionadora. Muchos visitantes aprecian la arquitectura bien conservada y la oportunidad de explorar las celdas, el patíbulo y la cámara de gas. Las visitas guiadas a menudo se describen como informativas, con un personal capacitado que comparte historias fascinantes sobre el pasado de la prisión y sus infames reclusos. Algunos visitantes encuentran la atmósfera inquietante e intensa, lo que se suma a la experiencia general. Sin embargo, algunos visitantes mencionan que ciertas áreas del museo podrían beneficiarse de un mejor mantenimiento o restauración. La colección de artefactos y fotografías del museo ayuda a pintar una imagen vívida de la vida tras las rejas en los primeros tiempos de Wyoming. Si bien el tema puede ser pesado, la mayoría de los visitantes consideran que el museo es educativo y estimulante. Vale la pena señalar que, debido a la naturaleza del contenido, puede no ser adecuado para niños pequeños o personas sensibles. En general, el Museo de la Prisión Fronteriza de Wyoming ofrece una mirada cruda y sin filtros a una parte importante de la historia de Wyoming, lo que lo convierte en una parada que vale la pena para aquellos interesados en la justicia penal o la historia local.
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